La capital lusitana es una maravillosa ciudad que mezcla lo tradicional con lo cosmopolita. Con más de 3000 años de historia y gracias a su posición estratégica, Lisboa ha sido puerto y ruta comercial entre Europa del Norte, América y África durante siglos. Alrededor de las orillas del río Tajo, los lisboetas ha visto crecer una urbe por la que han pasado fenicios, romanos y como no, musulmanes. Al igual que los españoles, los portugueses contaron con su propia reconquista, cristianización y nacimiento de un imperio en los mares. Pese a contar con una riquísima historia, Lisboa es casi una desconocida para los turistas europeos.
Una ruta turística por Lisboa: azulejos y tranvías
Lisboa es una ciudad de colinas, dividida en varios barrios que se han ido expandiendo hacia el interior. Su arquitectura y, sobre todo, la fascinación por los azulejos, consiguen que, se nos vaya el santo al cielo caminando y admirando sus edificios. Por ello es una buena idea contar con un calzado cómodo, y conocer la red de tranvías, que podremos usar para movernos rápida y fácilmente.
Tal extensión nos obligará a organizarnos para decidir qué ver y cómo llegar. Sin duda alguna, una de las alternativas más interesantes es el tour gratis Lisboa, que nos da la posibilidad de disfrutar de una ruta turística por Lisboa en un ambiente desenfadado pero profesional.
La Baixa y el Chiado: dentro de nuestro itinerario
En la Baixa está la Plaza del Comercio, situada en mismísimo centro, y es aquí donde comienza una ruta que nos llevará a pasar por el Arco de Augusta, la Iglesia de Santo Domingo y otros monumentos históricos.
Estos son sin duda dos de los barrios más importantes de la capital portuguesa. Con tantos siglos saludando al Océano Atlántico, cada una de sus calles huelen a mar y rezuman historia en cada rincón. Paredes que susurran secretos, que sólo los locales conocen e historias que no sabrán, a no ser que se lo cuenten.
Desde el explorador Vasco da Gama al dictador Salazar, Lisboa ha acogido a personajes y hechos históricos, como el terremoto de 1755, que los guías de White Umbrella irán desgranando mientras nos movemos por esta sinuosa ciudad. Las colinas que forman Lisboa, parten sus calles a diferentes alturas. Este recorrido que dura unas dos horas y media, también nos llevará a visitar el Elevador de Santa Justa. Un enorme ascensor con más de 100 años de antigüedad que conecta los barrios de la Baixa Pomballna y el Chiado. Desde aquí tendremos una maravillosa vista del océano y de la ciudad.
Lo bueno es que, aunque el tour se acabe, Lisboa sigue contando con muchas cosas que ver y disfrutar.