El campo concentración Dachau es sinónimo de hablar del primer campo de concentración nazi de la historia, un campo que permaneció abierto durante los doce años de vida del régimen nazi. Un período que puede parecer corto pero, todo lo contrario, se hizo largo para la sociedad europea y especialmente, para todos los afectados que fueron perseguidos por el famoso canciller Adolf Hitler y que eran considerados como una amenaza para el período que abría el régimen.

Adentrarse en el tour de Dachau es una gran oportunidad para conocer de primera mano el campo “modelo” que el partido nacionalsocialista clonó y exportó al resto del continente europeo.

Este siniestro y oscuro lugar, corazón del nazismo, situado a unos pocos kilómetros de la ciudad de Múnich, fue inaugurado por Heinrich Himmler en 1933 y liberado por las tropas norteamericanas en 1945, después de que 206.206 comunistas, socialdemócratas, y algo más tarde, opositores políticos, testigos de Jehová, gitanos, homosexuales y judíos fueran sometidos a cautiverio, experimentos, reenviados a otros campos de exterminio y todo tipo de penalidades. Desde los años sesenta, Dachau sirvió de lugar de referencia en el país germano para recordar a todas estas víctimas. El edificio de Intendencia, el memorial, la única cámara de gas original de toda Alemania, el crematorio, las condiciones de vida de los prisioneros, sus barracones… son algunas de las pausas que haremos por este recorrido que se antoja vital en su visita a la capital bávara.

Visitar el campo concentración Dachau es tener una auténtica lección de historia para el turista de cinco horas aproximadas de duración, muy difícil de olvidar, y un tour realizado desde el respeto más absoluto, acompañado de guías acreditados y expertos con los que no le faltará ningún tipo de detalle.

• Edificio de mantenimiento
• Sala de Registro
• Barracones
• Patio de Revista
• Condiciones de vida
• Crematorio/Cámara de gas
• Búnker
• Liberación
• “Escuela del Terror”
• Clasificación de prisioneros
• Memorial y mucho más…